Colegio de Arquitectos advierte que espacio no soportaría la carga de movilidad; buscarán diálogo con autoridades y Sedena
La posibilidad de utilizar la antigua estación del ferrocarril, ubicada en el centro de la ciudad de Querétaro, como punto de llegada para el tren México–Querétaro fue descartada por el presidente del Colegio de Arquitectos del Estado, Edgar Cetina García, quien argumentó que el lugar no reúne las condiciones técnicas ni de movilidad necesarias para un proyecto de tal magnitud.
A pesar de que se ha planteado como una opción por su valor histórico y su ubicación céntrica, Cetina García consideró que sería un error tratar de “meter con calzador” una obra de este tipo en una zona ya colapsada por el tránsito y la saturación urbana.
“Es una de las opciones. La terminal del centro es hermosa, padrísima y funcionó muy bien… pero si estuviéramos en el siglo pasado. Pretender meter una estación de trenes ahí sería incrementar el caos que de por sí ya tenemos en el centro de la ciudad”, expresó.
Según el especialista, las vías ferroviarias atraviesan una zona con alta densidad de población y tráfico, lo cual se agravaría si se añadiera la operación constante del tren de pasajeros. Además, señaló que la infraestructura vial actual no está preparada para recibir el volumen de personas y vehículos que generaría una estación de estas características.
“El tren va a trabajar la ciudad, eso es un hecho, no lo podemos evitar, pero al menos que toda la interconexión vial que tendrá esa terminal esté ubicada en un lugar idóneo. No podemos permitir que la movilidad se vea más afectada por insistir en mantenerla en el centro”, puntualizó.
El presidente del Colegio de Arquitectos subrayó que, como gremio, estarán pendientes del desarrollo del proyecto y que buscarán participar activamente a través de reuniones con autoridades estatales y con los ingenieros de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), quienes están a cargo de la obra.
Cetina García adelantó que el objetivo de estos encuentros será analizar técnicamente los aspectos del proyecto, desde la perspectiva profesional de los arquitectos queretanos, así como advertir sobre las problemáticas urbanas y de movilidad que podrían derivarse si no se elige un espacio adecuado para la estación terminal.
El proyecto del tren México–Querétaro ha sido una de las apuestas del gobierno federal para conectar con mayor eficiencia al centro del país, sin embargo, aún se afinan detalles sobre su trazo, estaciones intermedias y terminales definitivas. Ante ello, especialistas locales como el Colegio de Arquitectos han manifestado su disposición a colaborar, pero también su firme posición en evitar decisiones que puedan afectar la calidad de vida y el orden urbano en Querétaro.