Ciudadanos exigen la intervención de las autoridades ante las preocupantes denuncias en redes sociales
El Zoológico Wamerú, reconocido por décadas como un referente en la conservación y cuidado de la fauna en Querétaro, enfrenta una crisis que ha despertado la indignación de la ciudadanía. Desde el asesinato de su fundador, Armando Coello, en 2022, las condiciones del parque han sido fuertemente señaladas por su deterioro y la falta de atención a los animales.
En los últimos días, las redes sociales se han llenado de denuncias por parte de visitantes que reportan situaciones preocupantes dentro del zoológico. Las imágenes y testimonios compartidos muestran a diversas especies en evidente estado de estrés y abandono, algunas con signos de desnutrición y sin acceso a espacios adecuados para su bienestar.
Uno de los casos más alarmantes es el de los hipopótamos, que han sido vistos nadando en aguas contaminadas con sus propios desechos, una situación que ha generado indignación entre la comunidad. El cocodrilo se encuentra rodeado de basura y su agua está completamente podrida, mientras que los flamencos viven en agua pútrida, llena de excremento, con un olor insoportable.
Los visitantes también han mostrado preocupación por el estado de los grandes felinos. Un tigre fue visto en un espacio lleno de pasto seco, sin que siquiera le hayan limpiado su hábitat, con el agua completamente podrida. Los leones, visiblemente desesperados, sufren de sed y hambre, sin sombra ni árboles, solo encerrados en una jaula sin condiciones dignas.
Los monos, por su parte, muestran signos evidentes de estrés, algunos con heridas en los pies, debido a la falta de un hábitat adecuado. Además, se reporta que en algunas zonas del zoológico hay un fuerte olor a animales muertos, lo que ha causado un impacto aún mayor entre los visitantes.
El deterioro del Zoológico Wamerú no solo ha impactado el bienestar de los animales, sino que también ha afectado la experiencia de los visitantes, quienes han manifestado su descontento al encontrar instalaciones descuidadas y especies en malas condiciones. Ante esto, activistas, ciudadanos y expertos en vida silvestre han alzado la voz, exigiendo una revisión inmediata de la administración del parque.
El Zoológico Wamerú, que en su momento fue un símbolo de conservación y educación ambiental, atraviesa un periodo crítico que pone en duda su futuro. Mientras los testimonios sobre las condiciones del lugar siguen acumulándose, la incertidumbre crece entre quienes alguna vez consideraron este espacio como un referente en el cuidado de la vida silvestre.